Mediante la utilización de los
cuentos, a los niños se les pueden transmitir, algunos valores que les serán de
gran utilidad en un futuro.
También ellos aprenden a resolver
algunos problemas que se les presentan en su vida cotidiana.
DON SEMÁFORO
Este era un semáforo gruñón. A el
no le gustaba ser semáforo. Un día la esquina le dijo: -Oye, amigo, ¿No piensas
que eres importante? Si no estuvieras ahí parado, ordenando el transito, los
vehículos chocarían y las personas no pudieran pasar. – A mí no me importan las
personas. Pero Don Semáforo vio que un niño iba a cruzar la calle, y él estaba
en verde. Un camión venia corriendo mucho. Entonces Don Semáforo se asustó, se
puso tan rojo, pero tan rojo que el conductor del camión lo vio y se detuvo.
Don Semáforo salvó la vida al niño. Desde entonces está parado en cualquier
esquina de los pueblos grandes.
Autora: Beatriz C. Acosta. (Adaptación)
Tomado de la Revista Al
Compás.
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